Los bomberos del 112 recogen una tonelada de productos para el Banco de Alimentos de Cantabria
Santander- 23.12.2020
Los bomberos del Servicio de Emergencias 112 del Gobierno de Cantabria han recogido una tonelada de productos de primera necesidad para el Banco de Alimentos. En el día de hoy serán entregados en la sede con la que la entidad cuenta en Santander, para su reparto entre aquellas familias que lo necesitan.
La crisis sanitaria y económica provocada por el COVID-19 ha incrementado la demanda de comida en organizaciones de carácter social, razón por la que los efectivos del 112 han querido ofrecer su colaboración, como ya lo ha hecho en otras ocasiones con campañas propias, apoyando, esta vez, la gran recogida anual del Banco de Alimentos de Cantabria.
Para centralizar la solidaridad de los cántabros, que siempre responden ante este tipo de iniciativas, durante casi un mes han estado habilitados espacios para la donación de productos en los seis parques de bomberos con los que cuenta el servicio, distribuidos por toda la geografía regional (Laredo, Valdáliga, Reinosa, Tama, Villacarriedo y Los Corrales de Buelna).
Con el objetivo de agradecer su solidaridad tanto a los bomberos como a los ciudadanos, y de realizar una aportación a la campaña, ha acudido a la recogida del último contenedor con alimentos, situado en la sede del 112, la consejera de Presidencia, Interior, Justicia y Acción Exterior Paula Fernández. La titular de emergencias ha ensalzado “el compromiso de los bomberos, el personal de sala y de la población con quienes más lo necesitan, en un momento especialmente difícil en el que cualquier aportación, por pequeña que sea, es más importante que nunca”.
En este sentido, la consejera ha destacado la implicación del personal del 112 “siempre dispuesto a ayudar, incluso al margen de su actividad profesional”, así como de todas aquellas personas que han querido colaborar aun encontrándonos “en una situación compleja, con limitaciones a la movilidad establecidas para luchar contra la pandemia, durante la mayor parte de la campaña”.
Asimismo, ha recordado a los cántabros que minimizar los efectos sanitarios y económicos del COVID-19 “es compromiso de todos”, por lo que en estas fiestas “hay que extremar la prudencia, limitar al máximo las relaciones sociales, cumplir con las recomendaciones sanitarias, respetar la medidas impuestas por las autoridades y pensar que todos los esfuerzos que hagamos van salvar vidas”.
Recogida segura
Para garantizar la seguridad, tanto de las personas que han apoyado la iniciativa como de los propios bomberos, la recogida se ha efectuado depositando los alimentos en contenedores indicados al efecto, que se han situado en la parte exterior de las instalaciones del Servicio de Emergencias del Gobierno. Tras cada jornada, los efectivos autonómicos, con los equipos de protección individual necesarios, han desinfectado el material y lo han agrupado siguiendo los parámetros establecidos por el propio Banco de Alimentos.
Se han recogido alimentos no perecederos o con largas fechas de caducidad como legumbres, pasta, arroz, productos embotados, conservas, aceite, leche, cacao soluble, cereales, galletas, comida ya elaborada en lata, pan tostado, etc., y productos infantiles como potitos, cereales, leche de iniciación y de continuidad, productos de higiene infantil (pañales, toallitas, jabón líquido), etc.